Entrevista a nuestro delegado en Chubut, Ignacio Stankewitsch

Siguiendo con las entrevistas a nuestros delegados en el marco de nuestra asamblea nacional, desde Jujuy hoy nos vamos a la provincia de Chubut.

“Esperamos pronto llevar a cabo la reglamentación de la ley provincial”

Este último período fue dificilísimo. En nuestra provincia vimos, como en todas, el cierre de muchas fuentes de trabajo para los músicos,ya que al bajar el consumo la gente deja de ir a los espectáculos, a los restaurantes, a los boliches donde tocan las bandas, el público que va consume menos… A nosotros eso nos golpeó muy fuerte. Y los pocos que pudieron seguir trabajando, lo hicieron a la baja porque ni siquiera se les podía pagar lo que correspondía. Y nosotros debimos frenar varios reclamos que queríamos llevar adelante porque, aunque eran justos, la realidad se nos imponía…
Así y todo, en este período seguimos impulsando la puesta en marcha de la reglamentación de la Ley del Músico de la Provincia de Chubut, que para nosotros significa la Caja del Salario, los aportes jubilatorios de obra social… Lamentablemente sufrimos una situación de crisis general: los propios empleados provinciales ─los de salud, educación, judiciales─ cobran su sueldo en forma escalonada, así que ¿qué quedaba para nosotros? El Estado nos ve casi como un “accesorio”… Y nosotros, por las características de nuestra actividad, estamos más dispersos que otros trabajadores, inclusive a veces somos competidores entre nosotros mismos, falta conciencia gremial…
Todos esos factores jugaron en contra. Ahora tenemos expectativas, con el cambio de gobierno nacional, de poder llevar a cabo la reglamentación de la ley provincial, que nos va a permitir recaudar lo que corresponde de los 67 festivales que se hacen por año en Chubut, que los compañeros cobren como mínimo lo que marcan los CCT, y que la Caja provincial pueda pagarlo, en la provincia no cambió el signo político del gobierno, pero hay un compromiso ─al menos en el gobierno nacional entrante─ de que, a diferencia del gobierno anterior, se le van a mandar a las provincias las partidas que les corresponde. La crisis de nuestra provincia se debe en gran parte a que el gobierno nacional ha retenido las coparticipaciones, que tienen que ver con la pesca, la minería, el petróleo, el aluminio en Puerto Madryn… Al cortarse las coparticipaciones, la caja provincial no puede pagar ni los sueldos de los empleados, los médicos, enfermeros… No queremos que continúe un sistema en el que los compañeros tienen que facturar, a veces incluso a través de la factura de un amigo, etc., y después cuando lo necesitan no se pueden jubilar, no tienen la cobertura de la obra social porque no están aportando, etc. Esta situación también desfinancia a la Obra Social y al Sindicato, ya que si no entra el dinero que tiene que entrar no podemos dar la cobertura que corresponde.

También estamos con la Ordenanza de Teloneros de Comodoro Rivadavia, que estuvo frenada todos estos años por el mismo problema: si el Estado no cuenta con la Caja para hacer los pagos, te frena la reglamentación. Aparte que contrata menos, y termina pagando por debajo de lo que dicen los convenios.
En Chubut los mùsicos y mùsicas reclaman que les demos las coberturas que tenemos que dar. Ahora nosotros estamos tratando, desde la Obra Social, de formalizar los convenios con los colegios médicos y con las cadenas de farmacias para tener esas coberturas. Eso en sí mismo va a hacer que muchos compañeros que estaban expectantes o descreídos se arrimen y se sumen, asì que creo que vuelve un período de crecimiento. Las conversaciones con los colegios médicos y las farmacias están muy avanzadas, así que creo que eso saldrá pronto, aunque algunos de esos acuerdos (por ejemplo con el colegio médico del sur de la provincia de Chubut) están pendientes de algunos cambios que sus directivos esperan en la política económica nacional. Cuando se aprueben, eso beneficiará no sólo a nuestros afiliados de la provincia, sino a los de todo el país, que muchas veces están de gira y necesitan una cobertura ante cualquier eventualidad.

Ignacio Stankewitsch, regional Chubut

Media sanción a la Ley de Cupo Femenino en los escenarios

Un avance decisivo de las mujeres artistas y especialmente músicas hacia la equidad de género: la Cámara de Senadores dio su aprobación al proyecto de Ley de Cupo Femenino en los escenarios argentinos.

La Nota entrevistó brevemente a Nadiah Demarco, Secretaria de Género y Diversidad del SadeM.

 

¿La ley es de alcance nacional o con alcance sólo en la ciudad de Buenos Aires?

Quien la está debatiendo es el Congreso Nacional. Ahora ya tiene media sanción de Senadores y falta la media sanción de Diputados.

¿Qué fue lo que motivó la propuesta de crear esta ley? ¿ Ocurrían discriminaciones en los festivales?

Esta ley se propone porque la participación de las mujeres músicas en los escenarios es significativamente menor que la de los hombres. ¡Y no es que haya pocas mujeres músicas! Pero sucede que los organizadores no las programan, o no les permiten participar en los festivales. Por eso tomamos el tema desde el SadeM, que a través mío estuvo presente en la presentación de la ley en el Congreso y apoyó de diferentes maneras para que la ley recibiera esta media sanción.

¿Qué cambia en los escenarios con la aprobación de la ley? ¿Y qué significación te parece que tiene en toda la gran movida del movimineto de mujeres actualmente en marcha?

Con la aprobación de la ley ─es decir si recibe la media sanción que falta de Diputados─ los organizadores tendrán que programar un 30% de mujeres en los escenarios, ya sean solistas, agrupaciones mixtas o agrupaciones sólo de mujeres.

Es un avance muy importante para crear una sociedad musical más equitativa. Como solemos decir, podés estar de acuerdo o no con las leyes de cupo, pero estas leyes son discriminaciones positivas, ya que si bien al principio son obligaciones, luego de un tiempo de implementada se transformará en algo culturalmente correcto, que es como debería haber sido desde un principio.

 

“Una Ley que proteja pero también que asegure la libertad del artista”

Entrevista al Compañero Javier “Pato” Rearte desde Tucumán y con aporte de todo el equipo de nuestra querida delegación del “Jardín de la República”

 

LA NOTA- ¿Cómo fue en Tucumán la elaboración del proyecto de ley de
Reglamentación del Trabajo del Ejecutante Musical? ¿Qué participación buscaron
de los músicos de la provincia? ¿En qué aspectos les sirvió como referencia la ley
de Tierra del Fuego?
Pato: Al proyecto de ley lo fuimos elaborando en asambleas, comenzamos a hacer
territorio en distintos sectores de la provincia llegando hasta la zona de los valles
calchaquíes, con la idea de buscar información sobre la problemática de los músicos. A
partir de ahí fuimos sintetizando todo eso para ir elaborando el proyecto. Tomamos como
modelo la Ley nacional, y también nos sirvió la ley lograda en Tierra del Fuego, como
“modelo” para integrar ahí la problemática propia de la provincia.
También colaboró con esto la “Negra” (María Laura Vigliecca, secretaria de Organización
del SadeM nacional), que vino a Tucumán en varias oportunidades.
Así, reunión por reunión, se fue armando y corrigiendo, y se fueron resumiendo las
problemáticas parecidas de distintos lugares.

LA NOTA- ¿En qué punto está el trámite legislativo?
Pato: Una vez terminado de redactar, presentamos el proyecto ante la secretaría de
Cultura de la Legislatura. Pero la “durmieron” durante bastante tiempo, así que hace un
par de meses la volvimos a presentar, ahora a través del presidente subrogante de la
Legislatura. Y entonces ya ingresó con el compromiso de él de darle “estado
parlamentario”. La semana próxima vamos a tener una reunión para ver cómo seguimos
articulando para que el proyecto avance dentro de la Legislatura.

LA NOTA- ¿Qué importancia tiene en ésto la federalización del SAdeM? Qué
medidas de organización y movilización llevaron a cabo?
Pato: Lograr la federalización del SadeM sería muy importante, ya que así todo este
movimiento dejaría de ser el caso aislado de una sola provincia, y el reclamo tomaría más
fuerza. A medida que este tipo de movida se vaya armando en todas las provincias, toda
nuestra información se iría masificando, que es justamente lo que más nos cuesta. Y eso
haría mucho más fácil articular con los músicos de todo el país.
Somos concientes de que no es fácil modificar la conciencia de los músicos después de
tantos años de estar trabajando en la forma precarizada en que lo hacemos. La
federalización nos permitiría a todas las provincias hablar de lo mismo…
Tomamos algunas iniciativas, por ejemplo levantamos firmas para visibilizar lo de la ley.
Abordábamos lugares públicos en distintas partes de la provincia, levantando firmas y
charlando con los músicos de la zona, y también con la gente común, que nos apoyaba
con su firma acompañando este proyecto.

LA NOTA- Hicieron alguna otra iniciativa en relación a los músicos “callejeros”
¿Qué importancia tuvo para eso la ordenanza lograda en Pinamar?
Pato: Con respecto a los músicos callejeros, estamos trabajando con ellos desde
diciembre, cuando también empezaron a tener problemas en Tucumán. A ellos y a otros
artistas callejeros los echaron de algunos sectores públicos… Empezamos tomando una
de las peatonales más importantes del centro de la capital, visibilizando la problemática

ante el público. Y también para esto levantamos firmas: la gente firmaba en apoyo a los
artistas callejeros.
En esto tomamos como antecedente la Ordenanza lograda en Pinamar y tratar de
conseguir una parecida en Tucumán. Justo se dio el período de vacaciones en la
administración pública, así que el tema se debilitó temporalmente, pero ya estamos
volviendo a retomarlo.

LA NOTA- Qué significa en concreto para los trabajadores músicos "dignificar" su
profesión?
Pato: Creo que, como para cualquier trabajador, dignificar nuestro trabajo es la base para
sentirnos libres, y en nuestro caso que el artista sea libre para poder expresarse. Regular
la actividad sería fundamental para que el músico y cualquier artista tenga esa libertad, y
no ser esclavos o explotados, que es como muchos consideran al trabajador.

SADeM Tucumán

Delegados Provinciales

Julián Morel

Mauricio Suárez

Javier Rearte

Valeria Albarracín Andrés

Herrera Diego Lizárraga

Plan de acción – Secretaría de Género y Diversidad

Por Nadiah Demarco, Secretaria de Genero y Diversidad del SADeM

Ante la inequidad existente en el mundo musical con respecto a las mujeres, el colectivo LGTBIQ y los pueblos originarios creamos la Secretaría de Género y Diversidad.
Esta Secretaría desde su comienzo buscó y busca deconstruir una estructura cultural y residual patriarcal dominante.
Como punto de partida se hizo y se continúa haciendo un relevamiento en todo el país de personxs, organizaciones y agrupaciones que ya estaban o que comenzaron a trabajar en
esta búsqueda de equidad en nuestra profesión y en la vida cotidiana.
Para cumplir con este propósito creamos en nuestra página sadem.org.ar una pestaña de la Secretaría llamada “GENERO Y DIVERSIDAD” con un formulario para facilitar dicho relevamiento y poder realizar estadísticas.
También articulamos junto a la Secretaría de Organización el trabajo codo a codo con lxs compañerxs que tomaron la posta de la Secretaría de Género y Diversidad en cada seccional de nuestro país. Con ellos seguiremos profundizando sobre las problemáticas de género y diversidad cultural específicas de cada región. Por ejemplo, en Sadem Seccional Tucumán pudimos elaborar los puntos de la ley del ejecutante musical relacionados a las condiciones regionales de trabajo, esta ley que está en este momento en la legislatura tucumana, es un régimen laboral con perspectiva de género y diversidad cultural, donde se pide contrataciones equitativas para las mujeres y el colectivo LGTBIQ en espectáculos musicales.
También en la seccional Tucumán realizamos un trabajo junto a los pueblos originarios y como resultado se elaboró un proyecto para revalorizar la copla, el joy joy, la vidala, parte de nuestra identidad, mediante una ley que la declare patrimonio cultural de la provincia.
Para lograr dicha deconstrucción también seguiremos impulsando, generando y apoyando iniciativas, proyectos de ley, charlas debate, talleres, etc.
En esta época de redes sociales, creamos una fanpage en facebook: sademgeneroydiversidad donde volcamos todo el trabajo y contenido que vamos generando.
Una página hecha para seguir proyectándonos, para unirnos, para escucharnos, para informarnos, compartir nuestros problemas y crear iniciativas.
En este último período estuvimos presentes en la presentación en el Senado del proyecto de ley de cupo femenino en los escenarios impulsado por la agrupación
“por más músicas en los escenarios”, donde además sostuvimos y sostendremos nuestro apoyo y ayuda para que sea ley antes de fin de año.
Seguiremos luchando para que este cupo del 30% no sea un techo sino simplemente el descanso de una escalera que nos permita llegar a la paridad soñada.
Consideramos que esta ley es una herramienta para lograrla!!!
Participamos junto a compañeras músicas dirigentes de los Sindicatos de Músicos de Colombia, Cuba, Perú, México, Brasil, Uruguay, Suecia y Costa Rica del Taller de Género organizado por la Federación Internacional de Músicos en Montevideo.
Durante tres días debatimos acerca de la problemática de la mujer en la música y en las estructuras sindicales de Latinoamérica.
Allí nos planteamos la conformación de un equipo de mujeres músicas y dirigentes para articular desde los sindicatos la pelea por nuestros derechos laborales.
Creamos el ciclo “Mujeres en la Música” (un espacio para construir entre todes).
Este ciclo que se hará una vez al mes en SademArt nuestro pub auditorio se crea para visibilizar a través de charlas debate y shows todo lo relacionado al género y sus problemáticas. Un espacio que se está construyendo entre agrupaciones de músicas, músicas independientes, músicas de pueblos originarios, músicas de comunidades extranjeras que viven en nuestro país, musicxs del colectivo LGTNIQ y trabajadoras de la cultura para que aprendamos a escucharnos, a vernos, a reconocernos, a compartir y a crecer en esta lucha. No es estrictamente de mujeres, ya que consideramos que la única forma de lograr una sociedad laboral equitativa es que todes seamos parte de esta deconstrucción.
En una de nuestras últimas estadísticas relacionada con las orquestas argentinas tomando como base a los integrantes de catorce de ellas, encontramos un amplio crecimiento y que los números coinciden con las encuestas internacionales hasta superándolas por algún punto, hay un 31,78% de mujeres mientras que en estadísticas internacionales hay un 31%. Con respecto a Solistas o suplentes de Solistas encontramos una participación del 35,88%, que superan ampliamente el nivel internacional que es el 33%.
En cuanto a Capital Federal tomando como base a 2655 musicxs afiliadxs, encontramos que 673 son mujeres, un 18,41%.
De 1480 compañerxs que pasaron un salario por el SAdeM, 252 son mujeres, un 17,03 %.
Por este motivo y por todo lo dicho anteriormente vamos a seguir luchando y apoyando activamente a #NiUnaMenos, a la lucha por la Ley de Aborto Legal, Seguro y Gratuito y por sobre todo trabajaremos duramente en la capacitación sindical de este nuevo espacio que estamos gestando para que estos porcentajes crezcan de manera participativa y formemos un frente unido con voces al unísono para poder crear y poner en marcha las muchas faltantes normas que necesitamos para lograr la equidad de género en las leyes laborales
musicales.

Artistas Callejeros de Pinamar: un logro histórico , una ordenanza conseguida con la lucha!

Artistas Callejeros de Pinamar: un logro histórico

Una ordenanza conseguida con la lucha

 En Pinamar, el arte callejero ya no es ni será delito. Con una lucha y movilización de cuatro largos meses, y la participación protagónica del SAdeM, los artistas callejeros de Pinamar -y entre ellos los músicos- conquistaron la ordenanza que declara Patrimonio Municipal al arte callejero y protege tanto a los artistas como a sus instrumentos de trabajo.

Y lo consiguieron logrando imponer el recurso de “insistencia” con el que hicieron retroceder el veto que el intendente Martín Yeza había interpuesto a la ordenanza originalmente aprobada por unanimidad por el Honorable Concejo Deliberante de Pinamar. El proyecto, promovido, Gustavo Morini del Colectivo Cultural y María Laura Vigliecca -secretaria de Organización del Sindicato Argentino de Músicos-, y presentado Por el Concejal Gregorio Estanga de Unidad Ciudadana,  estaba y está dirigido a salvaguardar el arte callejero como “patrimonio cultural municipal” y frenar esta modalidad represiva contra la cultura que está imponiendo Cambiemos en todo el país.

Ahora, según informó el noticiario Telégrafo de Pinamar, los artistas callejeros podrán hacer su trabajo sin tener que pedir autorización “por vía de excepción” como intentaba el decreto de Yeza. Aunque habrá un registro de artistas de carácter público y gratuito, y cuya inscripción no es obligatoria. La ordenanza complementaria agregó el recaudo de que, si la actividad a desarrollarse es musical y requiere el uso de amplificación sonora, deberá atenerse a lo dispuesto en la reglamentación vigente sobre los horarios de descanso y los decibeles permitidos. Y prohíbe de manera explícita considerar a la música como “ruido molesto” También se establecen  los espacios donde podrá desarrollarse la actividad, entre ellos las plazas de municipio.

Y se fija claramente que los medios y los instrumentos de trabajo de los artistas “no podrán ser secuestrados, retenidos o decomisados por autoridades públicas bajo ninguna circunstancia”. “Sin los artistas en la calle, esta ‘insistencia’ no hubiera sido posible”, cerró su intervención ante la Legislatura la Secretaria de Organización del SAdeM nacional.

María Laura Vigliecca (Sec. de Organización del SAdeM)

“Hoy tenemos la primera norma en el país que declara patrimonio cultural al arte callejero”

El conflicto empezó a fines de julio, cuando la policía de Pinamar reprimió a “los chicos del rap”, en forma desmesurada e inédita en la ciudad. En una reunión con ellos nos contaron lo sucedido, y a partir de eso preparamos un proyecto de ordenanza que protegiera el arte callejero.

Esa represión se produjo en el marco de la profundización de la persecución que se viene desarrollando contra arte callejero en general en todo el país, como lo muestra el pedido de reforma del jefe de gobierno de la CABA, Rodríguez Larreta, con un código contravencional que criminaliza el arte callejero contemplando  penas de prisión para para los artistas y clausuras para los espacios privados, que son nuestra fuente de trabajo.

-Esta lucha tuvo dos momentos: uno hasta la obtención de la ordenanza y otro después del veto del intendente Yeza. ¿Cuál fue la acción de los artistas entre ellos los músicos y la del SAdeM a través tuyo?

Una vez presentado el proyecto de ordenanza de la mano de Unidad Ciudadana,  nos hicimos presente en todas las comisiones donde se consideró la norma y la defendimos, junto a otros actores del sector, hasta que salió aprobada.

A los pocos días aparece el veto del intendente.  Martín Yeza es Cambiemos, y claramente esta acción responde a la línea del gobierno nacional y provincial que viene castigando a la cultura y reprimiendo a los artistas, como políticas de estado. Probablemente hubo algún tirón de orejas de Larreta, ya que mientras él está promoviendo la reforma al Código Contravencional en la Capital, en Pinamar se le escapa la tortuga y los concejales de su partido en Pinamar aparecen aprobando una ordenanza que protege el arte callejero.

A partir del veto, los artistas nos fuimos organizando en asambleas y presentamos el pedido de “insistencia” de la ordenanza para que el Concejo Deliberante la volviera a aprobar. Para sostener ese reclamo salimos a la calle, con intervenciones artísticas, que hicieran visible el reclamo, el apoyo de la ciudadanía y los medios locales fue fundamental. Recibimos también el apoyo de la Legislatura de la provincia de Buenos Aires, que desde Unidad Ciudadana acababa de presentar un proyecto de ley provincial que basado en la ordenanza nuestra. Desde el SAdeM, participamos directamente en la redacción, siendo que fuimos los impulsores de la ordenanza de Pinamar.

Así fuimos trabajando, más las intervenciones en el Concejo, más las presentaciones de firmas y la movilización permanente de los artistas en la calle. Y finalmente logramos que el Ejecutivo en Pinamar abriera una mesa de trabajo, en la que se acordó la redacción de una ordenanza complementaria, con alguna ampliación de algún artículo como para que el oficialismo acompañara la insistencia y “dibujar” el hecho de que estaba dando marcha atrás de la decisión de Yeza. Así llegamos al día de la sesión en la que los concejales de Cambiemos volvieron a acompañar la iniciativa, que salió otra vez aprobada por unanimidad.

-¿Existía una coordinación previa de los artistas callejeros en Pinamar?

No. Anteriormente hubo algunos atisbos de organización, pero nunca se había llegado a nada. Esto fue un hito para la ciudad. En primer lugar porque hubo un plan de lucha sostenido durante tres semanas en la calle, articulado con distintos sectores de la cultura, con exhibiciones de arte callejero, música, una muestra de artistas plásticos en pleno centro de la ciudad… Pudimos mantener el tema en agenda durante esas tres semanas, y logramos que se diera vuelta el voto de los concejales de Cambiemos cuando el intendente acababa de vetar.

Y además en Pinamar veníamos con la experiencia de la ordenanza de centros culturales de hace dos años, en donde el intendente hizo lo mismo. Trabajamos aquella ordenanza, logramos la aprobación en el Concejo Deliberante, Yeza la vetó… Y en aquel momento el SAdeM participó y acompaño la redacción de la norma, pero no se pudo articular un plan de lucha y esa “insistencia” se perdió. Ahora, con la de Artistas Callejeros pudimos organizarlo.

En definitiva, hoy tenemos la primera ordenanza, la primera norma en el país que declara patrimonio cultural al arte callejero, y declara a la música expresión cultural -como bien dice la ley nacional- y no “ruido molesto”… Esto es en sí mismo una conquista histórica, ya que se trata de un reclamo que el Sindicato Argentino de Músicos viene sosteniendo desde hace muchísimos años.

-¿Desde el punto de vista organizativo esto significó una incidencia mayor del SAdeM entre los músicos de Pinamar?

Sí, sirvió para que los compañeros empiecen a reunirse, a organizarse, hay ganas de armar una seccional del Sindicato. La necesidad debe salir del territorio. Yo lo que hago desde Organización es acompañar las reuniones que ellos van teniendo, y discutir específicamente la problemática de Pinamar y de la Costa en general. Por supuesto que si aparece la iniciativa de organizarse y sumarse al el proceso de nacionalización del SAdeM en el que estamos trabajando hace unos años, entonces bajaremos la herramienta, como lo hemos hecho en todos los lugares donde nos llamaron. La necesidad tiene que nacer en el territorio, de lo contrario transformaríamos al SAdeM en un sello de goma.

EN PINAMAR,  LA MÚSICA NO ES DELITO, ES TRABAJO!

El Concejo Deliberante de Pinamar hizo norma la protección al artista callejero.

Desde hace varias semanas venimos trabajando con el bloque de Unidad Ciudadana de Pinamar el proyecto de ordenanza que protege a los artistas y declara al arte callejero Patrimonio Cultural del Municipio. La Secretaría de Organización del SAdeM, como parte del plan de acción asumido por la conducción del Sindicato impulsó el proyecto que se convirtió en la primera norma que establece que la música no podrá considerarse ruido molesto; histórico reclamo de nuestro gremio!

La criminalización de la música y el arte callejero en general llegó a Pinamar de la mano de fuerzas especiales de seguridad que reprimieron con gases y golpes a los raperos que se juntan todos los domingos desde hace años en las plazas de la ciudad. Desde el SAdeM venimos batallando  contra la reforma al Código Contravencional propuesto por el gobierno de Rodríguez Larreta en CABA, que agrava y le da un marco legal a la persecución que venimos sufriendo los músicos en la calle. Es decir aumenta las sanciones vigentes para la contravención de “ruidos molestos” estableciendo penas de hasta 5 años de prisión para los trabajadores de la música y le devuelve a la policía la facultad de “coacción directa”, o sea que la policía podría, si se aprueba esta reforma,  sin autorización judicial y a partir de una simple denuncia anónima, detener al músico y secuestrar sus instrumentos. Hoy es una práctica habitual del macrismo que se va profundizando en todo el país y que pone de manifiesto la necesidad de despenalizar la música a través de una ley específica que la reglamente, la fomente y la difunda. No se trata de que la música “quede impune” respecto de los códigos de convivencia respetando horarios de descanso y demás, sino de que se contemple su especificidad. En este sentido y ante la represión desatada contra los raperos en Pinamar esta Secretaría presentó el proyecto de ordenanza que regula la actividad y le otorga protección al artista, a su obra y a sus instrumentos de trabajo dentro del municipio.

La ordenanza presentada de la mano del Presidente del Bloque de Unidad Ciudadana, Concejal Gregorio Estanga,  ingresó al Concejo a través de la Comisión de Seguridad, todo un símbolo para sintetizar las políticas de este gobierno, y cuenta con tres puntos fundamentales. En primer lugar declara al arte callejero Patrimonio Cultural, con lo cual no solo lo pone en valor, sino que además le otorga una protección especial. Esto incluye a los trabajadores de la música y de cada disciplina artística. El segundo punto, es la prohibición de confiscar, secuestrar o retener los instrumentos de trabajo de los artistas en el marco del desarrollo de la actividad, poniendo freno dentro del territorio municipal a la política represiva y confiscatoria que se desató contra la cultura.  Por último, y más que fundamental,  para los músicos medular, se establece en su articulado un rotundo “Bajo ningún concepto la música será considerada ruido molesto”. La calificación de “ruido molesto” pone directamente en la mira al músico callejero, pero también a los pubs y restaurantes donde trabajamos, sin establecer ningún requisito para exceptuar a la música de esa calificación, impactando directamente sobre nuestras fuentes de trabajo.

Estos dos últimos  fueron los puntos más cuestionados por el Bloque Oficialista Cambiemos que proponían que el texto volviera a comisión, con el claro objetivo de no tratar el proyecto. Esta moción no fue acompañada por el resto de los concejales y a propuesta de Unidad Ciudadana nos abrieron el micrófono para exponer la realidad de los artistas del municipio. Allí planteamos la necesidad de regular una actividad que viene siendo fuertemente castigada,  no solo por las políticas de ajuste feroz que aniquiló el mercado interno impactando de manera directa en las fuentes de trabajo, sino también por la determinación de este gobierno de acabar con la cultura, persiguiendo y  reprimiendo a los artistas. En el cuarto intermedio trabajamos con los concejales de Cambiemos algunas modificaciones al texto, que finalmente lograron el voto unánime del cuerpo.

La Secretaría de Organización del SAdeM, como parte del plan de acción asumido por la conducción del Sindicato impulsó el proyecto que se fue nutriendo en las comisiones hasta transformarse en una norma, para los músicos estratégica teniendo en cuenta la coyuntura. La ordenanza de Arte Callejero de Pinamar se convirtió en la primera norma que establece que la música no podrá considerarse ruido molesto; histórico reclamo de nuestro gremio!

Ahora viene el tiempo de la reglamentación. Hay dos artículos para reglamentar, los mecanismos de inscripción en el Registro de Artistas Callejeros que la misma ley crea, y el diseño del Circuito de Arte Callejero. De no reglamentarse, igualmente es aplicable, no solo por estar vigente si se promulga, sino que además porque expresamente dice que ninguna de estas cuestiones impide el desarrollo de la actividad. La verdad es que no esperamos la reglamentación, y si consideramos el trato a la cultura por parte del modelo Cambiemos, diría que lo más probable es que sea vetada. El ejecutivo municipal lo hizo una vez con la Ordenanza de Centros Culturales con la que también colaboramos. Por otra parte el artículo que establece la creación de un Circuito de Arte Callejero determina que el ejecutivo debe diseñarlo juntamente con el Consejo de Políticas Culturales  también creado por una ordenanza   que sigue esperando la reglamentación.  Lo destacable es que si el intendente Martín Yeza no la veta y se promulga, con o sin reglamentación, en la próxima temporada habrá artistas callejeros en Pinamar trabajando sin el temor de ser detenidos o confiscados.

La lucha continúa. Esta semana mantendremos reuniones con el bloque de Unidad Ciudadana de la legislatura bonaerense que pretende impulsar un proyecto de ley provincial similar a la ordenanza aprobada en Pinamar. Para los artistas en general y los  músicos en particular,  esta es una conquista  importantísima que intentaremos replicar en cada rincón del país.

María Laura Vigliecca, Secretaria de Organización del SAdeM.

 

LA MÚSICA ES TRABAJO, NO ES DELITO!!! PROYECTO PINAMAR

PINAMAR. PROYECTO DE ORDENANZA SOBRE ARTISTAS CALLEJEROS

María Laura Vigliecca-Secretaría de Organización del SAdeM

Un signo de los tiempos: la represión oficial forzó que el proyecto tuviera que ser propuesto y discutido en la Comisión de Seguridad y Protección Ciudadana y no en la de Cultura…

Cada día queda más claro que al gobierno nacional, y a muchos gobiernos provinciales y municipales, no les caen bien las expresiones artísticas, esas que a diario se ven en calles y lugares públicos en general y que son verdaderos canales de cultura popular. Lo de esos gobiernos es más que un desagrado frente a esas expresiones: las persiguen, las reprimen. Quieren “disciplinarlas”. Las temen. Temen que se conviertan en una forma de expresión fuera de su control, en una vía por la que asome el profundo desencanto e indignación que la actual realidad económica, política y social va acumulando en la sociedad.

En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el gobierno de Rodríguez Larreta presentó un proyecto de reforma al Código Contravencional que intenta legalizar la represión que vienen sufriendo hace años los artistas callejeros de esa Ciudad, catalogando la música como “ruido molesto”, criminalizando la actividad e imponiendo la  confiscación de instrumentos, multas y hasta cárcel para los artistas. A los de Pinamar el desprecio oficial ya les cayó con fuerzas de “seguridad” y gas pimienta para “disolver” una peligrosa competencia de rap en la plaza de la vieja estación.

Pero van despuntando reacciones saludables. En Buenos Aires las marchas y concentraciones de junio y julio en el microcentro frente a la sede de la legislatura porteña, acompañada por movilizaciones en todo el país, lograron que se discuta una nueva normativa. En Pinamar el rechazo a la política represiva sobre los artistas, tomó la forma de un proyecto de ordenanza que protege el arte callejero. Un signo de los tiempos: la propia represión oficial forzó que tuviera que ser propuesto y discutido en la Comisión de Seguridad y Protección Ciudadana y no en la de Cultura.

El proyecto de ordenanza, presentado por el bloque Unidad Ciudadana, tiene tres ejes fundamentales, la declaración del arte callejero como Patrimonio Cultural Municipal, la prohibición de incautar los instrumentos de trabajo de los artistas, y la negativa a considerar la música como ruido molesto.-

Literalmente el proyecto tiene como fin “proteger, propiciar y fomentar la actividad artística en la vía pública, teniendo en cuenta que la cultura de un pueblo se constituye como recurso intangible e indispensable en la conformación de la identidad de cada comunidad”. Y en consecuencia deja sentado que “el estado es responsable del diseño de políticas culturales que fomenten la creación artística en todas sus formas y proteja tanto los espacios donde se desarrollan como a sus actores”. El proyecto de ordenanza califica al arte callejero como “expresión primaria y libre de la cultura de nuestra comunidad”, y considera que “el estado debe proteger al artista y garantizar la integridad de sus instrumentos de trabajo”.

Seguiremos discutiendo la propuesta en Comisión la semana próxima, acompañando desde el SAdeM esta iniciativa que visibiliza una problemática que se profundiza y que atenta directamente contra la libertad de expresión y la cultura.-

LA MÚSICA ES TRABAJO, NO ES DELITO!!!!!

Desde Tucuman y Tierra del Fuego – ¡Es indispensable darle un marco normativo a la actividad de los músicos!  

¡Es indispensable darle un marco normativo a la actividad de los músicos!

Como parte del trabajo de nacionalización del sindicato que venimos construyendo, próximamente se va a presentar en la provincia de Tucumán el proyecto de ley provincial que establece un régimen de trabajo para los ejecutantes musicales tucumanos. La Nota habló con Julián Morel, Secretario General de la Seccional Tucumán del SAdeM, para que nos cuente en qué etapa estamos en este sentido, y con Marcelo Mansilla, Secretario General de la Seccional Tierra del Fuego, provincia donde la ley 800 ya está absolutamente vigente y dando frutos en materia de derechos.

Julián Morel, Secretario Gral. SAdeM-Tucumán

“Vamos por un régimen laboral para los músicos tucumanos”

La Nota: ¿Cómo es la situación de los músicos en Tucumán? Ustedes están trabajando en un proyecto sobre el régimen laboral de los trabajadores músicos en la provincia…

J.M.: La realidad de los músicos en Tucumán no es diferente de la que viven los músicos en casi todo el país. Aquí no nos asiste ningún derecho como trabajadores. Hay una carencia absoluta de normativa que nos garantice las fuentes de trabajo y el ejercicio digno de nuestra profesión. En ese contexto estamos trabajando con la Secretaría de Organización nacional un proyecto de ley que esperamos vendrá a regular la actividad y a garantizarnos la inclusión en todos los beneficios de la seguridad social y el derecho del trabajo.

La Nota: ¿Cómo se viene trabajando el proyecto?

J.M.: Por ahora venimos discutiendo con los diferentes sectores de la profesión las distintas problemáticas y necesidades, para que esta ley venga a garantizar derechos y a establecer mecanismos de contratación para todos los trabajadores de la música en Tucumán, tanto del ámbito público como privado, eventuales o permanentes. En este sentido estamos organizando asambleas y reuniones en toda la provincia en las que participan compañeros de diferentes géneros, como las que se van a realizar en los valles en la última semana de julio, y una vez concluidas las actividades de Tafí, Amaicha, etc. estaremos presentando ya el proyecto definitivo en la Legislatura.

LN: ¿Qué perspectivas tienen de que el proyecto sea recibido y tratado en la Legislatura tucumana?

J.M.: En principio tenemos muchas expectativas de que sea recibido y tratado. Ya hemos mantenido algunas reuniones con los asesores de la presidenta de la Comisión de Cultura de la Legislatura, Silvia Rojkes, quien se ha mostrado con predisposición para acompañar el proyecto y discutirlo en Comisión. Nos parece estratégico que el estado finalmente mire a los artistas, reconozca la problemática, y se dé la discusión para empezar a resolverla. Un marco regulatorio para la actividad es indispensable, sobre todo en tiempos en que además de la precarización en la que trabajamos se suma el achicamiento del mercado interno, y por tanto el cierre de fuentes de trabajo.

LN: ¿Cuáles son las iniciativas del SAdeM para acompañar la presentación?

J.M.: Estamos juntando firmas de adhesión, haciendo actividades en la calle en las que los compañeros salen a tocar y a explicar la necesidad del sector, haciendo reuniones y asambleas. El 10 de julio movilizamos contra la reforma al código contravencional en Bs. As. junto a los artistas callejeros, y realizamos una volanteada con algunos puntos de la ley que nos parecen estratégicos bajo la consigna ¡Los músicos somos trabajadores! Y en esta oportunidad le agregamos la que la coyuntura nos marca con el avance del carácter represivo de la reforma de Rodríguez Larreta en CABA… ¡La música es trabajo! ¡No es delito!

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Marcelo Mansilla, Secretario Gral. del SAdeM-Tierra del Fuego

Dos herramientas clave en el mejoramiento de nuestras condiciones de trabajo “La Ley del Músico y el Sindicato”

La Nota: ¿Qué cambios hay en el ejercicio de la profesión para los músicos fueguinos desde que se aprobó en la provincia la Ley del Músico?

M.M.: Los músicos de Tierra del Fuego vivimos una realidad muy distinta a los compañeros del resto del país. Mientras en otras provincias los músicos tienen que pagar para tocar, acá logramos imponer la lógica contraria.
Conviene hacer un poco de historia. En el 2009, cuando se decide crear la filial del SAdeM en Tierra del Fuego, nos organizamos porque existía un vacío legal. La legislación no nos contenía como trabajadores músicos: lo que regía era el “tenés que pagar”, o “tenés que trabajar gratis para promocionar tu trabajo”, etc. Y a los poquitos meses de haberse creado la filial, los compañeros que entonces lideraban este trabajo, junto con los de la dirección nacional del SAdeM, presentaron el proyecto en la Legislatura de Tierra del Fuego, que terminaría siendo la ley provincial 800.
Ese proyecto buscaba cubrir ese vacío legal, donde no se nos reconocía como trabajadores. La ley implica darnos el status de trabajador, con todo lo que eso implica, como tienen todas las demás ramas de trabajadores, con sus Convenios Colectivos de Trabajo, etc., y la posibilidad de ir a pelear algunas cosas con el Ministerio de Trabajo.

LN: ¿Y cómo lo lograron? ¿Hubo acuerdos con sectores políticos…?

M.M.: No fue fácil… En ese momento justo había un cambio de gobierno, la gobernadora era Fabiana Ríos, y hubo algún espacio para que los legisladores nos pudieran escuchar. Y votaron la ley.

LN: ¿Cuáles fueron los cambios a partir de la ley en la relación con los empleadores?

M.M.: Bueno, tenemos dos sectores. Por un lado estamos los músicos que tenemos relación de dependencia con el Estado: acá en Tierra del Fuego tenemos dos bandas que dependen de los municipios de Ushuaia y Río Grande respectivamente. Nosotros hasta ese momento no estábamos reconocidos como músicos, sino que éramos trabajadores municipales. Por lo tanto, una de las primeras cosas que empezamos a trabajar fue el reconocimiento como músicos, la especificidad de nuestro trabajo: dejar de tener el status de trabajadores administrativos para ser reconocidos como trabajadores músicos.
En ese tiempo, en Ushuaia se estaba discutiendo el Convenio Colectivo de Trabajo, y los compañeros de allí pudieron ingresar a las paritarias del Estado y discutir el convenio sectorial. Te imaginás la importancia que tuvo conseguir una herramienta como ésta. Y había un trabajo sindical que lo respaldaba. En Ushuaia el SAdeM discute las paritarias, somos parte en las discusiones salariales, e integramos la Copar, que es una comisión paritaria permanente de revisión de los CCT, donde todos los compañeros municipales son parte.
Acá en Río Grande la situación de los compañeros que tenemos relación de dependencia con el Estado es otra. Todavía no se está discutiendo el CCT, pero estamos a la espera de que se abran las paritarias y nos reconozcan como músicos.
Por otro lado está el sector privado, donde tenemos la posibilidad, gracias a la ley 800, de articular un montón de mecanismos para que, trabajando en conjunto con el Ministerio de Trabajo, se reconozcan algunos derechos a los trabajadores. Hay mucho trabajo por hacer.
Somos conscientes de que no a todos los músicos en Tierra del Fuego les gusta esto de organizarse en un sindicato para conseguir algunos derechos. Pero nosotros vemos al sindicato como una herramienta de transformación, y el compromiso que hemos asumido con los compañeros es trabajar por abajo, reorganizarnos en esta etapa en la que estamos tan complicados, para poder seguir sosteniendo estos derechos, y avanzar hacia otros.
Afortunadamente acá los dueños de los locales, pubs, etc. reconocen el trabajo, se están respetando los acuerdos. Siempre hay un pillo que quiere desconocerlos, pero bueno, la idea es trabajar juntos. Más allá de que el sindicato es una herramienta de los trabajadores músicos, nosotros queremos que los empresarios de la provincia lo vean como una institución que además pelea para garantizar las fuentes de trabajo para nosotros los músicos.
En Ushuaia también hemos metido un golazo gigante, que fue la apertura de la caja de salarios. Porque antes dependíamos de algunos contratos, o de tratos de palabra, y había demasiados intermediarios. Hoy, afortunadamente, el Sindicato logró que allá se firmen los contratos, el Sindicato cobra los montos y es el que garantiza el cobro de los compañeros músicos. Es un trabajo brillante que se está iniciando, articulando directamente la estructura del Nacional con los delegados de la Seccional, y el aporte que significó la asistencia de inspectores para capacitación en la provincia. Lo han hecho los compañeros de Ushuaia, y por supuesto pensamos implementarlo también en Río Grande.
Para lograrlo contamos con una ley, con la que de a poquito vamos avanzando en algunas cuestiones. Pero no podemos hacerla cumplir en su totalidad si no convencemos a nuestros compañeros músicos de la necesidad de estar organizados. Somos conscientes de que acá vivimos una realidad distinta a la de otros músicos en la Argentina, y más en estos momentos del país en que estamos teniendo una situación sumamente complicada, porque los que trabajamos en boliches etc. vivimos de esto y dependemos del gasto que haga el cliente, y con el achicamiento del mercado interno lo primero que se resiente son las actividades de recreación de la gente.